AGRESIÓN DE VIOLENCIA FAMILIAR

Seamos honestos, cada familia tiene sus desacuerdos de vez en cuando. Pero, por lo general, los problemas se resuelven dentro de la familia y prevalecen las cabezas más frías. Sin embargo, una vez que se llama a la policía, ya no es un asunto estrictamente familiar.

Desde un punto de vista práctico, solo hay tres resultados favorables y aceptables para una persona acusada de un caso de agresión familiar.

1. Despido Veredicto de no culpable Reducción a un delito de Clase C con adjudicación diferida.

Si su objetivo final es evitar una condena y permitir que se borren sus registros, necesitará uno de estos tres resultados. Sin embargo, incluso la reducción de la Clase C es algo cuestionable cuando se trata de la elegibilidad para expurgación.

Por lo general, los casos se acusarán como un delito menor de Clase A. En un asalto familiar de clase A, una persona puede recibir un castigo que consiste en hasta un año en la cárcel del condado y una multa de hasta $ 4,000. Para un caso en el que el castigo invocado es tiempo en la cárcel, libertad condicional o adjudicación diferida, esa persona no será elegible para que se sellen o eliminen sus antecedentes penales.

Además, un asalto por asfixia / estrangulamiento, un segundo cargo de asalto familiar y un delito de violencia continua contra la familia se imputarán como delito grave de tercer grado con un posible castigo de hasta diez años de prisión y una multa de $ 10,000.

Estos son casos graves que pueden tener consecuencias colaterales importantes, incluyendo la pérdida de los derechos de armas de fuego, la pérdida de los derechos de los padres y la pérdida de oportunidades de empleo.